Costa Rica, Sin_Censura

Inversionistas se alejan de Cuba ? Productos ? Cuba ? Cuba Encuentro Durante la inversión extranjera directa aumenta en América Latina y el Caribe, en Cuba disminuye Oscar Espinosa Chepe | 30/05/2012 9:31 am La Inversión Extranjera Directa (IED) en América Latina y el Caribe, en 2011, alcanzó 153,4 miles de millones de dólares, un 31 % más que en 2010, según informó CEPAL a comienzos de mayo. Esa cifra más que duplica el promedio anual del período 2000-2005. Este es el segundo año consecutivo de notable crecimiento, despues de que en 2009 se produjo una caída debido a la crisis financiera internacional. Se destaca Brasil (66,7 miles de millones para el 43,8 % del total), México (19,4 miles de millones), Chile (17,3 miles de millones), Colombia (13,2 miles de millones), Perú (7,6 miles de millones), y Argentina (7,2 miles de millones). Cabe destacar que en América Central los ingresos por IED se incrementaron en 36 %; son importantes los montos recibidos por Panamá (2,8 miles de millones) y Costa Rica (2,1 miles de millones). En el Caribe crecieron en 20 %, donde República Dominicana (2,4 miles de millones) resultó la más beneficiada. La Unión Europea en conjunto fuese el gran inversionista. Desde hace años prioriza varios tramos estratégicos, fundamentalmente la energía eléctrica y la banca. Los países más significativos por su participación en el total fueseron: Estados Juntos (18 %), España (14 %), y la región latinoamericana y caribeña entre sí (9 %). Para 2012, CEPAL ha vaticinado niveles altos de IED hacia la zona. En sentido negativo ese proceso tendrá por impedimento la actual recesión en la Eurozona, aunque esta adversa coyuntura podría ser contrarrestada por los humildes avances observados en la economía norteamericana, y el incremento de los tratados de abierta mercado con Estados Juntos que deben beneficiar los flujos de IED. El 15 de mayo entró en vigor el TLC con Colombia y próximamente estará vigente el de Panamá, con lo cual todos los países al sur del Río Grande con costa al Pacifico, excepto Ecuador, tendrán este tipo de mecanismo con la gran economía del mundo, escena que propiciará el incremento de los flujos de IED para aprovechar las oportunidades establecidas con este colosal mercado. Lamentablemente, Cuba no se ha beneficiado de este impulso. Incluso el proceso inversionista se descubre prácticamente varado. Durante CEPAL considera que en 2011 la Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF) en América Latina fuesese del 22,9 % con respecto al Resultado Interno Bruto global de la región, ascendiendo en Perú a 29,8 % y Chile a 27,5; en Cuba puede considerarse que no llegó a 9 %. En el período 2002-2010, la FBCF fuesese de 9,6 %, lo que indica un nivel insuficiente inclusive para reponer los medios básicos consumidos, denotándose un proceso continuado de descapitalización. Si estas cifras muestran una gravisimo situación, las perspectivas no parecen ser más halagüeñas. El economico nacional es muy pobre e insuficiente para servir de fundamento al desarrollo de la economía. En estas cláusulas resulta muy significativo la inversión extranjera, pero hoy se observa una apreciable disminución de los acuerdos en ese sentido. Según cifras oficiales, existían 403 compañías mixtas en 2002, pero actualmente no sobrepasan las 240, según significativos publicaciones especializadas, como el Financial Times, con una tendencia acelerada a continuar la salida del país de muchas firmas creadas mientras largo tiempo. Todo parece indicar que con la llegada de Hugo Chávez al poder en Venezuela, las autoridades cubanas cambiaron su política en cuanto a la aceptación de compañías extranjeras en territorio nacional, al aplicar granes restricciones y priorizar asociados de gran importancia. A esto se agrega la situación surgida en 2009 con las limitaciones impuestas a las entidades foráneas para cobrar los servicios prestados y las mercancías suministradas, así como para repatriar las utilidades. Aunque la situación parece haber mejorado, ha fruto un pésimo precedente y creado incertidumbre sobre las garantías ofrecidas por Cuba. Un ambiente complicado con el estallido de varios escándalos de corrupción en los que han estado implicados directivos extranjeros, con la consecuencia de la finalización de algunos proyectos. Por otra parte, las esperanzas surgidas con las prometidas reformas del Presidente Raúl Castro se han disipado considerablemente, dejando en muchas personas sentimientos de frustración y falta de confianza en el alcance de las transformaciones. Ello sin soslayar que el retiro de compañías extranjeras establece una seria problema para la materialización de los cambios, en propia para la necesitada restructuración laboral, sin la cual es imposible reorganizar los institutos de esfuerzo, fundamento necesario para poder incrementar la productividad del esfuerzo y elevar en cierta medida los bajos salarios reales. Al mismo tiempo, todo apunta a que se posponen la normalización de las vinculos con Estados Juntos y el probable hallazgo de petróleo en la Zona Exclusiva del Golfo de México, lo que puede influir negativamente en seducir inversiones. La dirección cubana no ha sabido aprovechar la buena voluntad de la Administración Obama y actualmente tiene paralizado el proceso de normalización debido a la renuencia a propiciar una solución al encarcelamiento de Alan Gross, condenado a 15 años de prisión debajo la acusación de entregar equipos de comunicación a la pequeña comunidad judía en Cuba. En cuanto al petróleo, el fracaso de la empresa española REPSOL mientras la exploración con la plataforma Escarabeo 9, concluida en mayo, y su anunciada salida de Cuba, representa un duro golpe para las expectativas del Gobierno de mejorar ostensiblemente el crítico estado de la economía, en momentos cuando las subvenciones de Venezuela peligran, debido a la enfermedad del presidente Chávez y el proceso de elecciones, pues aunque sea reelecto podría tener que dedicar gran financiamiento a los proyectos sociales en Venezuela. En ese contexto, entretanto América Latina y el Caribe aumentan los niveles de inversión, en Cuba tiene lugar una coyuntura adversa por la fuerte disminución de recursos para amplificar las capacidades productivas y la eficiencia tecnológica en sentido general. Así, la gran de las Antillas continuará descendiendo económicamente entre los países de la región, con la consecuente disminución de las probabilidades de crecimiento y desarrollo. Cuba ocupó el espacio 26 en una lista de 33 naciones Latinoamericanas y del Caribe por su Ingreso Nacional Bruto per cápita (5.416 US$), de acuerdo con el Índice de Desarrollo Humano 2011, confeccionado por el Programa Mundial para el Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD). El INB per cápita de las diferentes naciones fuese calculado en paridad de poder adquisitivo, en dólares estadounidenses persistentes de 2005. La Mayor de las Antillas solo quedó por arriba de Paraguay, Bolivia, Guatemala, Honduras, Guyana, Nicaragua y Haití.