Costa Rica, aves de la oscuridad, misteriosas y simpáticas

Un día de estos, un jugador de fútbol tuvo la pésima idea de patear a una lechuza frente a las cámaras. De seguro, ya se ha arrepentido mil veces de lo que hizo, aunque si no debiera sido por el repudio común hacia su acción, no debiera tenido que disculparse y reflexionar tanto sobre ello. Se dice que Walt Disney, de adolescente, sorprendido por el comportamiento defensivo de una lechuza, la mató lanzándola contra un árbol. Luego se sintió tan mal, que juró no matar a ningún otro animal. Disney ha compensado su acción incluyendo búhos en muchas de sus películas animadas. Como ocurre con muchos animales nocturnos (murciélagos, zorros pelones y chotacabras), los búhos y lechuzas duermen mientras el día y por tanto, son complicados de observar, y ello lleva a que muchas personas se dejen llevar por lo escaso que ven y oyen de ellos. Si pensamos en estos animales nos vienen a la mente palabras como sabiduría, filosofía, verdad, paciencia y quizás determinadas menos agradables como muerte y maldad. En Costa Rica, se dice que el cántico del majafierro Glaucidium brasilianum indica que alguien va a morir. Es interesante que en Kenia ocurra lo mismo con una lechuza de nombre Kikuyu. Y también en México, donde hay un dicho que dice: ?Cuando el tecolote canta, el indio muere?. Los masivos ojos que miran fijamente (unos 2.5 veces más masivos que los de otras aves) y el cántico misterioso entretanto la noche pueden tener mucho que ver con esas ideas. El temor a lo desconocido es fuerte y ¿Por qué no otorgar poderes sobrenaturales a un ave que canta y se pasea entretanto intentamos dormir? Antes de seguir, ¿Cuál es la diferencia entre los búhos y lechuzas? Las lechuzas suelen tener un disco facial, y carecen de las plumas que lucen como orejas o cuernos que sí caracterizan a muchos búhos. Repasemos determinadas de las características de estos animales: -Los masivos ojos de los búhos nos indican que la visión es un sentido significativo mientras la noche. Dispone de mayor porción de ?bastones? que le facultan ver en la oscuridad, pero tambien de ?conos? para diferenciar los colores. Esto útimo podría ser no sólo significativo para cazar, sino para alimentar a los pichones, pues de acuerdo a un reciente estudio, los padres alimentan más a los pichones que presentan menos ultravioleta en sus picos. Idéntico que nosotros, los búhos tienen los dos ojos colocados en un mismo plano, esto le brinda visión binocular, es decir, pueden ver en tres dimensiones y les es sencillo calcular la distancia a la que se descubre su presa. A diferencia de los humanos no pueden mover los ojos y por eso es tan significativo que puedan voltear la cabeza con rapidez. -Vuelo silencioso: las plumas de los búhos no son iguales a los de otros pájaros. Son mucho más suaves y esponjadas y suelen tener colores café, blanco y negro. Al parecer determinadas de sus plumas al golpear contra el aire, reducen la turbulencia, silenciando el vuelo y tornando a estos animales en desagradables sorpresas para sus presas. El próximo video presenta el vuelo de un búho (se los recomiendo) Sonidos o cántico: Se dice que los búhos ululan, es decir, profieren gritos o aullidos. Por supuesto, cada especie tiene su propio cántico y algunos son más interesantes que otros. Resulta interesante que muchos ornitólogos han aprendido a imitar el cántico de un búho para seducir a las aves. Parece que el cántico genera una respuesta de defensa de muchas aves que se reunen para hostigar al depredador en potencia. Yo vi una vez a un grupo de zanates persiguiendo en pleno día a un búho, la verdad, me dió un escaso de lástima este último. Incluyo un video del interesante comportamiento de una lechuza que tiene dos estrategias: 1) Esponjar el plumaje para parecer más grande cuando se descubre a otra lechuza de dimensión parecida al propio. 2) Plegar sus plumas contra su cuerpo y detenerse de recurso lado para lucir tan flaca y desnutrida como sea posible. Esta táctica la emplea al descubrirse con un buho de gran tamaño, con el quien reñirse no resulta buena idea. Pregunté a Paula Álvarez, manejadora de recursos naturales, acerca de las principales razones por las que llevan búhos a los institutos de rescate.  Esta es su respuesta: ?Los búhos pequeños como Glaucidium brasilianum, Megascops choliba y Megascops clarkii generalmente ingresan como pichones, no por heridas. El asunto es que en determinadas estacións del año, como en Semana Santa, después de la estación de reproducción, determinadas personas se encuentran a estos búhos en el suelo y lo primero que hacen es llevarlos a un instituto de rescate, sin saber que apenas son volantones y que posiblemente la madre anda en los alrededores. Lo que se puede realizar es esperar que la madre busque y encuentre el pichón; sin embargo si hay determinado depredador cerca, entonces podemos ubicar el búho en una caja de cartón y ya cuando sea de noche, se suelta en el mismo espacio y se vigila entretanto llega la madre. El Dr. Randall Arguedas, veterinario del zoológico Simón Bolivar indica que  si se ha recogido un búho pequeño, lo ideal será llevarlo a un instituto de rescate de vida silvestre, pero que si eso no afuera posible, podría intentar alimentarlos con ratones o carne balanceada. Además, que hay que alimentarlos cada 2 a 4 horas y para ello se requiere de bastante tiempo. Los búhos medianos como Pseudoscops clamator Ciccaba virgata, o los más masivos como Ciccaba nigrolineata  y Tyto alba, en su mayoría llegan con determinado trauma como un ala quebrada por motivo de atropellos o por un choque fuerte con cierta ventana. Si embargo, despues de una cirugía generalmente se recuperan bien?. Cuando sabemos más de cerca a los búhos y lechuzas podríamos querer tener a una de estas aves como mascota. Sin embargo, como animales silvestres, ellos deben habitar en su ambiente natural y la mejor manera de cuidar de ellas es cuidar los bosques y sitios en que habitan. ¿Qué pensad usted de los búhos? ¿Qué especie es la que acompaña a Harry Potter? ¿Conoce usted otros búhos famosos? Algunos enlaces interesantes: Sonidos de la noche Texto por M.Sc. Rose Marie Menacho